Mis Obras Literarias: 2010

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Día de la Madre.

Hoy deseo saludar en este día muy especial a todas y cada una de las madres del planeta, y lo haré de la única manera que se hacerlo.

Madre no es la mujer que trae hijos al mundo,
sino aquella que los anida en sus brazos,
que los alimenta, que los abriga y los protege,
aquella que daría su vida por su hijo,
la misma que se esmera de noche y de día,
la que con tierno amor dirige los pasos de su retoño,
ya sea en primavera o en otoño.

Madre hoy en este día te saludo con cariño,
recordando las caricias que me distes cuando niño,
madre como tú ya has partido de este mundo
te saludaré en nombre de todas las madres,
aunque esté yo moribundo.

(Raúl Peña y Lillo Valenzuela)

Estoy trabajando en este libro virtual para ustedes.

Gracias por su comprensión

El autor.

Poesía 1

1

Miro tu rostro pálido
cual papel sin letras,
veo como de tus órbitas faciales
se desprende lluvia.

Siento tu corazón latir,
sin descanso y sin salir.

Mira niña mira,
como tus rizos dorados
danzan con la brisa,
mira niña mira,
como en tus labios
se dibuja una sonrisa.

(Raúl Peña y Lillo Valenzuela)

Poesía 2

2

El cielo se ha enojado
y con redobles de tambores,
su llanto nos ha dado.

En la tierra corrió la brisa
sin descanso y presurosa,
de los árboles cayeron
hojas perezosas.

Gotas, gotitas y goterones,
bailaron al ritmo suave
de nuestros corazones.

Poesía 3

3

Una suave flauta
cantó temprano al alba,
despertando a quien dormía
en su sueño abrasador.

El cielo ocultó estrellas
dando paso al sol,
la vida empezó de nuevo
con luz y con calor.

Todos corrían presurosos,
de un lado a otro
sin ser perezosos.

Poesía 4

4

Lamento mi vida lamento,
si con un suspiro mío
te di tormento,
perdona cielo perdona,
si mi pena te corona.

Quisiera cantarle a la vida,
pero mi alma la tengo herida,
deseo olvidar mis penas,
pero sólo angustias
corren por mis venas.

Necesito mi agobio vencer
y volver a renacer,
necesito sentir la vida,
como suave melodía
que se canta noche y día.

Poesía 5

5

Dormido me quedé
entre los brazos tuyos,
sin sentir del río,
su paso ni murmullo.

Sentí de tu pecho
los tímidos latidos,
que sirvieron de lecho
a mis pasos abatidos.

Madre, madre querida,
con un suspiro tuyo
sanaste mis heridas.

Madre, hoy en este día
te recuerdo con cariño,
con besos y alegría.

Poesía 6

6

Madre,
noble dama,
amiga tierna y compañera,
amiga fiel y consejera.

Madre,
tu guiaste mis pasos
con amor y con cariño,
forjando con dulzura
mi destino.

Madre,
hoy en este día,
te recuerdo con cariño,
sin olvidar aquel instante,
cuando al cielo tu partiste.

Madre,
hoy en este día,
no puedo con un beso saludarte,
pero en mi corazón
sólo puedo recordarte.

Poesía 7

7

Hoy,
en el día del padre,
recuerdo con nostalgia
a ese noble amigo,
que a mi lado ya no está.

Hoy en este día,
una doble pena,
un doble dolor,
a mi alma embarga.

Mi padre ya no está
y en día como hoy,
mi querida madre,
eternamente se durmió.

En un día como hoy,
el Noble Creador,
a mi padre y a mi madre,
en el cielo reunió.

Poesía 8

8

Entre espinos y pastizales
una frágil flor nació,
y en un pétalo que deshojó,
este poeta un poema escribió.

En este pétalo de flor,
escribí tan sólo para ti,
este bello poema de amor.

Al mirar tus grandes luceros
y al ver en ellos destellos,
comprendí tus besos sinceros.

Ni el tiempo presuroso,
ni el drástico olvido cautivó,
a la flor que un día se marchó.